CIENCIA
Espacio

Cambios bruscos en la temperatura de la Luna disparan las existencias de agua helada

Los resultados de la llegada de una nave India al polo sur lunar suponen un gran avance en la futura exploración, e incluso habitabilidad, a largo plazo de nuestro satélite

Módulo de aterrizaje Vikram en la superficie de la Luna.
Módulo de aterrizaje Vikram en la superficie de la Luna.ISRO
Actualizado

Hace apenas año y medio el módulo de aterrizaje Vikram de la nave Chandrayaan-3 logró alunizar con éxito cerca del polo sur de la Luna, a unos 69 grados de latitud, colocando a la India al frente de la carrera por construir asentamientos fuera de nuestro planeta.

El polo sur lunar se había convertido en el destino de moda de las grandes potencias espaciales, atraídos por sus masas de agua congelada. Las pruebas de su existencia son sólidas y están confirmadas de manera remota desde 2019. Incluso están cartografiadas las zonas de acuerdo con su abundancia. Pero ahora, de acuerdo con los resultados obtenidos por la Chandrayann-3, el hielo está presente a unos pocos centímetros por debajo de la superficie en más áreas de las regiones polares lunares de lo que se creía anteriormente. Todo ello, debido a grandes variaciones grandes en las temperaturas de la superficie en zonas muy localizadas.

Los resultados, que acaba de publicar Communications Earth & Environment, suponen un gran avance en la futura exploración, e incluso habitabilidad, a largo plazo de la Luna. La mayor parte del hielo hasta ahora descubierto se ubicaba a la sombra de cráteres, donde las temperaturas más altas nunca superan los -156 grados centígrados, debido a que la pequeña inclinación del eje de la Luna hace que la luz solar nunca llegue a esas regiones.

Para saber más

El investigador Durga Prasad y sus colegas analizaron las lecturas de temperatura tomadas en la superficie lunar, y a una profundidad de 10 centímetros, y descubrieron que las temperaturas en el lugar de aterrizaje del módulo de Chandrayaan-3, una pendiente orientada hacia el Sol con un ángulo de 6°, alcanzaron un máximo 82 grados, pero bajaron a -168 durante la noche lunar. Sin embargo, luego se midió una temperatura máxima más baja, de 59 grados, en una región plana a apenas un metro del módulo de aterrizaje.

Los autores utilizaron los datos recopilados para derivar un modelo de cómo el ángulo de la pendiente afecta la temperatura de la superficie en latitudes lunares similares al lugar de aterrizaje. El modelo indicó que, para las pendientes que miran en dirección contraria al Sol y hacia el polo más cercano, una pendiente con un ángulo mayor de 14° puede ser lo suficientemente fría como para que el hielo se acumule cerca de la superficie.

Se trata de unas condiciones similares a las de los polos lunares, incluidas las de los lugares de aterrizaje propuestos para las misiones tripuladas Artemis de la NASA cerca del polo sur lunar. El pasado mes de diciembre, y como temían muchos expertos del sector espacial, la NASA anunció que no lanzaría en septiembre de 2025 su misión tripulada Artemisa 2 para orbitar la Luna, ni en 2026 Artemisa 3, que era la que descendería a la superficie lunar por primera vez desde que en 1972 concluyó el programa Apolo, aplazando la misión por lo menos hasta mediados de 2027.

Con los resultados de la Chandrayaan-3, los investigadores indios sugieren que las áreas en la Luna donde se puede formar hielo pueden ser mucho más numerosas y de mucho más fácil acceso de lo que se creía anteriormente.

El polo sur lunar es una región helada que podría convertirse en una gran fuente de abastecimiento masivo de oxígeno, hidrógeno y agua que permitiría, además de colonias permanentes, el lanzamiento de futuras misiones desde su superficie. El interés estratégico de las grandes potencias espaciales se ha disparado en el último lustro. En los polos hay abundantes cráteres por todas partes, existen zonas completamente a oscuras que hacen absurdo el uso de placas solares, y las temperaturas pueden estar por debajo de 230 grados centígrados.