La crisis de Vox en Valencia ha desbaratado los planes de la la alcaldesa, la popular María José Catalá, que este jueves ha anunciado la creación de una oficina antiokupación en la ciudad. Pero lo ha hecho al mismo tiempo que ha reconocido públicamente lo que en realidad lleva días barajando en privado: una segunda remodelación de su equipo de gobierno, forzada por el paso al grupo de no adscritos de dos concejales de Vox.
La salida de Juanma Badenas y Cecilia Herrero de Vox no sólo supone la fractura del grupo municipal -ha pasado de cuatro a dos concejales-, sino que además ha dejado a Catalá con un gobierno en minoría. Es más, la alcaldesa mantiene en la actualidad en su equipo de gobierno a dos concejales de Vox y a una edil del grupo de no adscritos como es Herrero.
La decisión de Vox de expulsar temporalmente a Badenas obligó a Catalá a apartarlo de su equipo de gobierno, si bien mantuvo a Herrero. En la nueva carambola, la alcaldesa no descarta volver a integrar al ex portavoz de Vox expulsado por el partido con nuevas competencias de gobierno. De hecho, él y Herrero ya han permitido con su voto que prosperase una iniciativa de la izquierda sobre Mestalla.
"En los próximos días es probable que se produzca una remodelación del gobierno", ha afirmado la alcaldesa tras visitar las obras de unas viviendas que está construyendo AUMSA, y preguntada por si Badenas podría volver a tener competencias de gobierno, ha dicho que lo están analizando con los secretarios y la asesoría jurídica municipal.
En paralelo, la alcaldesa lanza un guiño a Vox con el anuncio de la oficina antiokupación, que ha defendido en todo caso como un "compromiso electoral". Catalá, que en la campaña de las elecciones municipales en 2023 prometió una brigada policial antiokupación, ha avanzado que este viernes la Junta de Gobierno Local aprobará la moción impulsora de la oficina.
"Será una oficina centralizada, donde todas las personas que sufran en su comunidad de propietarios una ocupación irregular van a poder llamar para desarrollar directamente una acción pública dirigida a evitar que esas situaciones sucedan", ha explicado Catalá, que ha desvelado que ha estado en contacto con otras ciudades con iniciativas similares, como Badalona. Según Catalá, Valencia va a desarrollar también "políticas muy contundentes antiocupación".