"Wayne Griffiths ha decidido dejar la compañía a petición propia con efecto inmediato para emprender nuevos retos" reza el escueto comunicado de Seat SA en que anunciaba la salida de su CEO desde octubre de 2020. Un tiempo durante el que ha logrado los mejores resultados financieros de su historia y se ha consolidado Cupra como una enseña más del Grupo VW y una de las de mayor progresión en Europa.
Markus Haupt, vicepresidente ejecutivo de Producción y Logística, ocupará el puesto de forma interina y el sucesor definitivo se anunciará próximamente. El propio Haupt tiene argumentos para serlo, con más de 20 años en el grupo alemán, ya trabajó en Seat y ha sido presidente de VW Navarra, por lo que está más que al día de la electrificación de VW en España. De hecho, ahora mismo se encarga de esa tarea en Martorell. Pero, por especular, el español Fermín Soneira, CEO de la joint venture de Audi y SAIC en China, tambien podría ser un buen candidato.
Cosas que 'chirrían'
Pero hay cosas que no encajan en la abrupta salida de Griffiths. La más chocante, lo que dijo el directivo de 59 años- que ha desarrollado toda su carrera en el Grupo VW- en la presentación de los resultados de 2024:" Espero jubilarme aquí". Además, aunque no se ha hecho público, el pasado año habría renovado su cargo. Y tanto Oliver Blume, CEO de VW, como las familias Piëch y Porsche, sus máximos accionistas, le han apoyado públicamente.
Es más, los resultados respaldan su gestión. En 2024, Seat logró unos beneficios operativos récord de 633 millones, los más altos de su historia, con un margen del 4,4% que se habría elevado hasta el 5% de no haber sido por los aranceles al eléctrico Tavascan que producen en China.
Nuevos coches eléctricos
"Nuestro objetivo es consolidar la rentabilidad de la empresa y los proyectos en marcha. Para dedicarme a eso deje Anfac y no me arrepiento" dijo también a mediados de marzo recordando su, hasta ahora, espantada más sonada. Cuando dimitió como presidente de la patronal de los fabricantes por "la falta de apoyo" del Gobierno de Pedro Sánchez.
Y es que, con Griffiths como cabeza visible, el consorcio alemán ya trabaja para la fabricación de los coches eléctricos pequeños de Cupra, Skoda y Volkswagen en Martorell y Pamplona. Estarán en el mercado entre 2026 y 2027 y las baterías les llegarán desde la gigafactoría Sagunto.
Seat como marca
Asimismo, tras el cuestionamiento interno de Seat años atrás, su ya expresidente confirmó que la histórica marca seguirá teniendo cuerda, gracias también a la flexibilización de la norma de emisiones CAFE. Aunque hasta 2030 no se tomaría la decisión de electrificarla o no. "Con el mercado actual, no tiene sentido un Seat eléctrico". Finalmente, el mismo Blume ha dado el OK a seguir adelante con los planes para que Cupra se venda en EEUU desde 2030, un proyecto que desvinculan de los aranceles que Trump establecerá desde mañana.
¿A otra compañía?
De ahí que la palabra "sorpresa" sea la que se repite en la compañía. Hay que desliza un cese. Matías Carnero, presidente del comité de empresa y miembro del Consejo de Supervisión del Grupo VW, cree que sería una salida hacia otra compañía avalado por los resultados en Seat. De ser el caso, en Alemania no se lo habrían tomado muy bien...
¿Podría ser a Renault? De Meo ya llevó de Seat a Renault a Josep María Recasens, hoy su número dos. También podría fichar a Griffiths, a quien tuvo como vicepresidente comercial en su etapa al frente de la española. Pero eso implicaría que De Meo abandonase Renault...