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La palabra negligencia sobrevuela el valle de Laciana. Ya lo advirtieron ayer algunos vecinos: "Los dos dueños anteriores estuvieron en la cárcel". Y es la empresa Blue Solving la que ahora está en el centro de una investigación que la Guardia Civil está llevando a cabo para esclarecer si los trabajos en la mina de Cerredo que ayer arrebató la vida a cinco trabajadores y dejó gravemente heridos a otros cuatro se ajustaban a los permisos concedidos a la sociedad minera.
La reconversión de la industria minera por la normativa europea provocó el cierre del yacimiento en 2018. "No se puede hablar antes de tiempo", señala un antiguo minero de Villablino (León), "pero la empresa era conocida aquí". En esta línea, la Benemérita pide no adelantarse. Apuntan a la investigación de los permisos de Blue Solving para investigar la viabilidad de la mina para la obtención de grafito como un proceso "protocolario" tras un accidente laboral.
Sin embargo, hay dos incógnitas latentes: el tipo de permisos en vigor y la actividad que se estaba llevando a cabo dentro de la mina.
Sobre el grafito, Miguel, minero jubilado, explica que se trata "de una vena como grasienta dentro del carbón". Pero advierte que ayer, cuando se enteró, se trataba de algo "nuevo" para él: "Yo nunca he trabajado haciendo eso. Será complejo".
Y es que, precisamente, la mina de Cerredo fue desprecintada como un yacimiento "del futuro". El empresario que invirtió en ella es el celebérrimo Victorino Alonso. Todo el mundo sabe quién es: "Trajo mucho dinero a la comarca", coinciden todos. De igual forma, Blue Solving, que cogió el relevo del empresario leonés, tenía permiso para investigar la extracción de minerales con prestaciones para la transición ecológica, informa El Comercio.
La investigación del accidente baraja, además, que fuera una bolsa de gas grisú lo que detonase la explosión que ayer se registró a las 9.32 en la mina de Cerredo. Los vecinos lo dan por hecho y critican la ausencia de medios para haber detectado el gas a tiempo. "Lo que harán será taparlo, como siempre. Luego los muertos se les olvidarán", arguye un minero. La otra hipótesis plantea la explosión de alguna máquina. En ese caso, mineros en activo critican las malas condiciones de seguridad en las minas: "Nos han abandonado".
Desde la capilla ardiente que hoy ha tenido lugar en el polideportivo municipal de Villablino, el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha recordado su "shock" al enterarse "ayer al mediodía" de la explosión. "Las minas habían cerrado hace seis años", ha indicado antes de advertir: "No vamos a autorizar ni permitir ninguna reapertura si no tiene las condiciones de seguridad" correspondientes.
Subvención para la mina
Como indica el Ministerio para la Transición Ecológica a este diario, la empresa Blue Solving recibió una subvención de más de 920.000 euros del Instituto para la Transición Justa (ITJ) "para la recuperación de antiguas instalaciones para recuperación y valorización de materiales estratégicos a partir de subproductos minerales, incluida una zona de almacenamiento". Subrayan que "en ningún caso" se subvencionó a la empresa "para la actividad extractiva".