Un ataque con drones ruso ha matado a dos personas en Jarkiv, Ucrania, según las autoridades. Los rusos atacaron un hospital militar, un centro comercial, bloques de apartamentos y otros objetivos en la segunda ciudad más grande de Ucrania la noche del sábado.
"Según información preliminar, hubo heridos entre los militares, que recibían tratamiento en el centro médico", informó el Estado Mayor del ejército, que denunció el "bombardeo deliberado y selectivo" de las instalaciones, que, según afirmó, "se suma a la larga lista de crímenes viles y cínicos cometidos por los rusos desde el comienzo de la invasión de Ucrania". Uno de los muertos fue rescatado de entre los escombros.
Las autoridades calculan que el número total de heridos era de 27. Oleh Syniehubov, gobernador regional, informó de que 25 personas resultaron heridas, incluida una niña de 15 años que se encuentra en estado grave.
Situada junto a la frontera rusa, la ciudad ha sido un blanco frecuente de ataques aéreos. Debido a su ubicación, con frecuencia los misiles o los drones llegan antes de que la gente pueda ponerse a cubierto con las alarmas.
Las defensas aéreas ucranianas destruyeron 65 de los 111 drones lanzados por Rusia durante el ataque nocturno, explicó la fuerza aérea de Kiev en un comunicado este domingo. Otros 35 drones se "perdieron" sin causar daños, generalmente por interferencias electrónicas. Pero sí alcanzaron su objetivo y se reportaron daños en las regiones de Kharkiv, Sumy, Odesa y Donetsk.
El viernes, Zelenski dijo que Ucrania espera una fuerte respuesta occidental a estos últimos ataques con drones rusos. Kiev está tomando medidas en la línea del frente y en las zonas que ocupa dentro de Rusia para "garantizar" que los rusos no puedan entrar en las regiones de Sumy y Jarkiv.
Rusia podría estar preparando una nueva ofensiva en las próximas semanas para fortalecer su posición en posibles conversaciones de paz con Ucrania, informó AP citando a analistas ucranianos y dos fuentes diplomáticas del G-7. Zelenski ya advirtió de que Moscú está planeando atacar las provincias de Sumy y Jarkiv esta primavera. La ocupación de más territorio ucraniano alentaría al presidente ruso, Vladimir Putin, a buscar condiciones aún más ambiciosas en un potencial acuerdo en el que Estados Unidos intente mediar. Por eso, el Kremlin estaría paralizando las conversaciones de paz para ganar tiempo y que sus tropas se apoderen de más territorio.
Por su parte, el Ministerio de Defensa de Rusia acusó el sábado a Ucrania de atacar instalaciones energéticas rusas en las últimas 24 horas a pesar de la moratoria sobre los ataques a la infraestructura energética de otro país.
La guerra sigue, tres años sin alto el fuego, y ahora ha trascendido que el número de combatientes rusos muertos en Ucrania ha superado la cifra de 100.000, según un recuento independiente del servicio ruso de la BBC y el sitio web de noticias Mediazona. Calculan que entre 160.000 y 165.000 soldados rusos han muerto en la guerra, pero ahora han conseguido poner nombres y apellidos a 100.000 basándose en fuentes abiertas.