Polémica en Coslada tras la cancelación de una exposición del artista Rubén García que se iba a inaugurar este viernes, 4 de abril. La muestra, cargada de imágenes "subidas de tono", había sido aprobada en diciembre pero, a tres días de su estreno, el Consistorio de esta localidad (PSOE) ha decidido dar marcha atrás.
"Algunas pinturas no son aptas para los niños. Es cierto que hubo un error por parte del Ayuntamiento al ofrecerle la planta de abajo del centro cultural Antonio López, que es donde está la entrada y pasa todo el mundo, incluido los menores de edad. Pero no le hemos censurado. Se le ha propuesto mover su exposición a otra sala más grande, en la planta de arriba, dentro de unos meses", explican fuentes municipales de Coslada.
Algo que no ha convencido del todo a este pintor. "Sabían desde diciembre el concepto de mi muestra. No escondí mis cartas. No les mandé jarrones con flores para luego ponerles coños en la pared, por así decirlo", cuenta a este diario García, haciendo alusión a la obra elegida para publicitar su exposición: una recreación de El origen del mundo (L'Origine du monde) de Gustave Courbet, colgado en el Museo de Orsay de París en 1966.
"En su momento ya causó mucha polémica en la sociedad francesa por su contenido, ya que es una imagen muy concreta del cuerpo femenino que yo he recreado. Y ahora, en 2025, ha vuelto a pasar lo mismo", matiza este artista, quien también versionó la portada del disco sacado en 1995 por el grupo A palo seko, en la que se puede intuir a Heidi masturbándose, además de a otros personajes de esta serie infantil en posturas provocativas. "Yo estoy alucinando como artista, están siendo reaccionarios de manera preventiva... Porque en mi recreación no se ve la imagen entera, está cortada justo en su zona íntima".
Su enfado radica en que, durante estos casi cuatro meses, se reunió con los responsables del área de Cultura "dos o tres veces" y "no hubo inconvenientes ya que sabían que mis obras eran explícitas".
Otro ejemplo son sus imágenes de geishas, recreaciones de grabados japoneses del siglo XIX. "Son de carácter erótico, pero estamos hablando de una exposición de pintura, donde es subjetivo interpretar algo sexualmente explícito o no", agrega, resaltando que el Consistorio está "actuando con miedo preventivo": "Para mí es censura. No permitir algo que está programado desde hace tiempo aludiendo a un posible problema jurídico...".
Emilia Escudero, concejala de Cultura de Coslada, admite el "fallo" de su área al no haberse "dado cuenta antes" y desgrana que el propio García explica en su folleto que su muestra "no es recomendable para menores de 18 años". "Advierte de que es un contenido explícito. Si un padre quiere ir a verla con su hijo, perfecto. Pero si te lo encuentras de manera involuntaria... Porque se iba a situar en el hall, que coges el ascensor y tienes el cuadro casi en la cara. Por eso no tenía sentido ponerlo en esa zona", afirma Escudero, tras ser preguntada por GRAN MADRID.
Por el momento, García se está pensando si aceptar el cambio de ubicación, pero le es complicado apaciguar su enfado. "Es un trabajo de mucho tiempo que se va a la basura. Te dan una alternativa, sí, pero es como si vas a un festival porque te prometen tocar a las 22.00 horas y, más tarde, te cambian a las 16.00".
La peculiaridad de García se basa en recrear obras ya existentes con bolis bic, lápices de colores o rotuladores, materiales "cotidianos" con los que intenta reflejar, a su vez, la "precariedad" del sector artístico donde "muchos creadores tienen que compaginar con un trabajo que te permita llenar la nevera".